Ninguna revuelta social nace de una sola causa, y mucho menos una con la furia mostrada en Nepal. Fue una reciente prohibición de las redes sociales lo que llevó a los jóvenes a tomar las calles de Katmandú, la capital de este país del Himalaya, pero los manifestantes acudieron a la llamada con una larga lista de agravios que se han ido acumulando a lo largo de los años.
Un dron en casa de los Wesolowski
La guerra siempre estuvo cerca de este pueblo en una zona de lagos,...